Dolor muscular de aparición tardía - ¿Qué es el DOMS y puedo entrenar con él?

El dolor muscular de aparición tardía (DOMS) se produce como consecuencia de daños microscópicos en el tejido muscular y el tejido conectivo circundante durante el ejercicio físico. Cuando realiza una actividad a la que no está acostumbrado o cuando aumenta la intensidad o la duración de su entrenamiento, sus músculos se someten a estrés y tensión. Esto provoca pequeñas roturas en las fibras musculares y una respuesta inflamatoria, que es normal.

El cuerpo repara y construye músculos más fuertes en respuesta al estrés físico, lo que conduce a un aumento de la fuerza y la resistencia con el tiempo.

Sí, generalmente es seguro hacer ejercicio con delayed onset muscle soreness (DOMS). Es común experimentar cierta molestia muscular después de un nuevo entrenamiento intenso, y siempre que el dolor no sea severo, puede continuar ejercitándose a pesar de la molestia. Es una buena idea centrarse en otros grupos musculares que los que le duelen.

Aquí hay algunas pautas básicas para hacer ejercicio con DOMS:

• Entrenamientos más ligeros: Si la molestia muscular es leve a moderada, puede continuar ejercitándose, pero puede ser prudente reducir la intensidad y evitar un esfuerzo excesivo en los músculos afectados. Los entrenamientos más ligeros, como ejercicios aeróbicos de baja intensidad o entrenamientos de fuerza ligeros, pueden ser beneficiosos.

• Recuperación activa: El ejercicio ligero puede ayudar a aumentar la circulación sanguínea y promover una recuperación más rápida. El estiramiento y los ejercicios ligeros también pueden ayudar a reducir la rigidez en el cuerpo. ¿Por qué no probar una clase de yoga?

• Escuche a su cuerpo: Si la molestia muscular es muy intensa o si está experimentando un dolor que se siente diferente a la molestia muscular, es posible que sea mejor darle a su cuerpo más tiempo para recuperarse y evitar el ejercicio extenuante hasta que el dolor desaparezca.

• Recuerde beber agua y calentarse y enfriarse: Beba abundante agua y asegúrese de hacer que su sangre fluya con un buen calentamiento y de enfriarse y estirarse después de sus entrenamientos.

• Consulte con un entrenador o médico: Si la molestia muscular no cede o si no está seguro de si debe hacer ejercicio, es posible que sea prudente consultar con un entrenador o médico para ver si se trata de una lesión.